Desde niños y hasta la madurez, el ser humano ha desarrollado siempre su instinto protector con respecto a familiares y personas cercanas. Saber en cada momento que están seguros y en buen estado de salud es una necesidad innata. Es esa necesidad el origen del seguro de vida: no son pocas las personas que viven angustiadas por problemas económicos o por su futuro familiar si falleciese alguno de sus miembros. El seguro de vida se convierte así en una herramienta importante en casos de urgencia económica, aportando cierta tranquilidad a los familiares más cercanos. La misma aseguradora hará llegar a los beneficiarios la cantidad contratada en la póliza. Sigue leyendo