En la sociedad globalizada e hiperconectada en la que vivimos el riesgo a sufrir un ciberataque es cada vez mayor. A pesar de que las nuevas tecnologías aportan numerosos beneficios a las empresas en diversos ámbitos, no hay que ignorar que tecnología y cibercrimen crecen al mismo ritmo, haciendo que la protección de la información sea cada vez más difícil. Sigue leyendo