En primavera, la alergia al polen puede poner en peligro la conducción de los más de 650.000 moteros alérgicos en España.
Conducir con alergia aumenta el riesgo de sufrir un accidente de circulación en un 30%. La concentración de polen es mayor en ambientes secos y núcleos urbanos, donde las partículas contaminantes aumentan la respuesta inmunitaria de los alérgicos. Sigue leyendo