Una vez solventados los primeros desafíos de cualquier persona que trabaje expatriada pueden llegar los imprevistos. En especial los referentes a la salud. Porque cualquiera puede sufrir un accidente doméstico o en la calle; soportar una enfermedad leve; o precisar una revisión periódica para una dolencia congénita, como la hipertensión, explica PassportCard, que ayuda a diferenciar un seguro de salud para expatriados de uno de viaje. Sigue leyendo