La pandemia de la COVID-19 “ha afectado al equilibrio funcional y emocional y al autocuidado de las personas, de una forma global. Millones de personas en todo el mundo han visto cómo sus rutinas, proyectos y deseos se han visto contrariados. Además, se dan casos de mentalidades negativas, miedos, inhibiciones, personas que se encierran en sí mismas, relaciones interpersonales que desaparecen o se enfrían, un temor latente al contagio del nuevo coronavirus y, en general, una pérdida de la serenidad y el sosiego interiores”, expone el Dr. Jerónimo Melchor García San Cornelio, psiquiatra de IMQ. Sigue leyendo